Véronique Dupuis era una periodista muy reconocida que trabajaba en un periódico muy reconocido en su país. Un día, su jefe le encomendó una misión muy interesante:
"Tu próximo artículo será sobre los pueblos Bosquimanos. Tendrás que viajar a Botsuana para conocer su cultura y costumbres."
Véronique se quedó sorprendida. Nunca antes había escuchado de esos pueblos, y ni siquiera de Botsuana. Se puso a investigar, descubriendo que los Bosquimanos son pueblos indígenas del sur de África, cazadores- recolectores, y su territorio se expande por varios países. La periodista se enteró también que unos grupos de Bosquimanos vivían en la Reserva de Caza del Kalahari Central, la cual se encuentra en Botsuana, un país del África austral.
Algunas semanas después, ya teniendo un bagaje sobre el país y los Bosquimanos, Véronique partió haciax Gaborone, la capital de Botsuana. Allí se encontró con Janet, una guía turística que conocía los Bosquimanos.
"¡Vamos al Museo Nacional Y Galería de Artes! Allí encontrarás algunas fotos de los Bosquimanos" -, le dijo Janet a Véronique.
"¡Estupendo!"-, contestó Véronique-. "Este museo es también conocido como el Museo Nacional de Botsuana"-, agregó Véronique.
Véronique y Janet recorrieron el museo con emoción.
"¡Mira un Bosquimano con un palo para hacer fuego!"-, le indicó Janet.
"¡Y mira otro con una flecha para cazar!"-, exclamó Véronique.
Las jóvenes salieron del museo muy felices. Véronique ya tenía más información sobre los Bosquimanos, así que partió en compañía de Janet hacia el desierto del Kalahari.
Cuatro días después llegaron al desierto donde vivían los indígenas.
"Bienvenidas!"-, les dijo el jefe de la tribu-. "Vengan a conocer cómo es nuestro diario vivir. Es la primera vez que un periódico nos viene a entrevistar".
Véronique descubrió que los Bosquimanos comían muchos animales que cazaban. Comió junto con ellos carne de león, de hiena, de sapo, y de otros animales.
Así mismo, nuestra protagonista observó que, con la visita de los turistas, los Bosquimanos tienen la posibilidad de vender artículos de caza, joyas y cinturones de cuentas, artículos de cuero e instrumentos musicales.
Por otro lado, Véronique pudo apreciar que Botsuana tiene un clima tropical, lo cual le da el privilegio de tener los animales más característicos de la fauna africana.
"¡Mira esa Jirafa! ¡Es muy alta!"-, exclamó Janet.
"¡Sí! ¡Pero estoy asombrada porque es la primera vez que me encuentro con un guepardo!"-, exclamó Véronique,
Días después, Véronique se despidió de los Bochimanes, y le dio las gracias a Janet por haberla ayudado a redactar el artículo para su periódico.
"Gracias a Dios y a la vida, puedo concluir que he conocido a un pueblo que vive casi alejado del mundo"-, dijo Véronique para sí.
Gracias al artículo de Veroniquee, los fieles lectores del periódico pudieron saber un poco sobre Botsuana y los Bosquimanos.
