La economía del cuidado y su vínculo con el cooperativismo


41
Compartir en:
cooperativismo

En los últimos años, el término “economía del cuidado” ha ganado protagonismo en debates sobre desarrollo, equidad y sostenibilidad. Se refiere al conjunto de actividades necesarias para garantizar el bienestar diario de las personas: cuidar a niños, personas mayores, enfermos o personas con discapacidad, así como tareas domésticas esenciales que permiten que la sociedad funcione.

Aunque estas labores son fundamentales, históricamente han sido invisibilizadas, no remuneradas y, en su mayoría, realizadas por mujeres. Hoy, reconocer el valor del cuidado es un paso crucial para construir una sociedad más justa y sostenible. Y es aquí donde el cooperativismo tiene un papel transformador.

A diferencia de los modelos de mercado tradicionales, el cooperativismo pone en el centro a las personas. Las cooperativas nacen para satisfacer necesidades colectivas, no para maximizar ganancias. Bajo esa lógica, son espacios ideales para reconocer, visibilizar y retribuir el trabajo de cuidado.

En países como Argentina, Canadá y España, ya existen cooperativas del cuidado, formadas por mujeres, que prestan servicios de acompañamiento, asistencia domiciliaria y apoyo a comunidades vulnerables. Estas cooperativas les permiten obtener ingresos dignos, acceder a seguridad social y recibir formación continua, al tiempo que ofrecen un servicio de altísima calidad, con enfoque humano y solidario.

Colombia ha avanzado en el reconocimiento de la economía del cuidado como una dimensión clave del desarrollo. Iniciativas públicas y comunitarias empiezan a abrir espacio para la creación de cooperativas enfocadas en este sector, especialmente en zonas donde el acceso a servicios de salud o atención domiciliaria es limitado.

Aquí, el modelo cooperativo no solo representa una oportunidad económica para cientos de mujeres cuidadoras, sino también una respuesta ética y sostenible a un problema estructural: ¿quién cuida a quienes cuidan? Además, al formalizar este tipo de trabajos, se promueve la equidad de género, se reduce la pobreza y se fortalece el tejido social de las comunidades.

En Coomeva, el bienestar de las personas ha sido siempre el eje de nuestra razón de ser. A través de programas que promueven la salud preventiva, el acompañamiento familiar, la recreación y la educación, seguimos fortaleciendo un modelo cooperativo que reconoce el cuidado como una labor esencial para el desarrollo social.

El cooperativismo puede y debe jugar un rol clave en visibilizar, profesionalizar y dignificar el trabajo de cuidado. Porque cuidar no es solo un acto de amor: también es un acto político, económico y transformador. Es una invitación a construir un modelo más inclusivo, donde el cuidado no sea una carga invisible, sino un pilar reconocido y compartido por toda la sociedad.

Haz parte de Coomeva Cooperativa y contribuye a una economía más humana, donde el cuidado y la solidaridad sean el motor del bienestar colectivo. Al ser asociado, participas activamente en iniciativas que fortalecen el desarrollo personal, familiar y comunitario, y apoyas un modelo que reconoce el valor del cuidado como una inversión para el futuro.

Hazte asociado aquí.

Fuentes de consulta: 

  • ONU Mujeres. (2023). La economía del cuidado como motor del desarrollo.
  • CEPAL. (2022). El trabajo de cuidados en América Latina y el Caribe. 
  • Confecoop. (2023). Innovación social en el modelo cooperativo colombiano. 
  • Coomeva. (2024). Compromiso con el bienestar y el desarrollo integral de los asociados.

Este espacio es para comentarios acerca del contenido del blog, si requiere hacer alguna solicitud o información de alguna de las empresas del grupo si es Asociado a Coomeva Cooperativa por favor puede hacerlo a través de nuestros canales de contacto.