En un mundo cada vez más cambiante y competitivo, la formación permanente se ha convertido en un pilar fundamental para el crecimiento personal y profesional. En Colombia, más personas están reconociendo la importancia de adquirir nuevos conocimientos y habilidades para enfrentar los retos actuales. Según el Ministerio de Educación Nacional (MEN), el 65% de los colombianos considera que la capacitación constante es esencial para progresar en sus carreras.
El aprendizaje continuo va mucho más allá de los estudios tradicionales. Hoy existen múltiples formas de fortalecer las competencias personales y profesionales: desde cursos cortos y talleres hasta programas virtuales y certificaciones en línea. Plataformas como Coursera, Platzi y SENA Virtual ofrecen oportunidades accesibles para quienes desean actualizar sus conocimientos o incursionar en nuevos campos.
Por ejemplo, un colaborador que trabaja en el sector financiero puede beneficiarse de cursos en planeación financiera, mientras que un emprendedor podría fortalecer sus habilidades en liderazgo y gestión de proyectos. Incluso quienes están interesados en temas de bienestar pueden encontrar programas sobre inteligencia emocional o técnicas de relajación, que les permitan mantener un equilibrio entre la vida personal y laboral.
El aprendizaje continuo también tiene un fuerte componente de adaptación. Las tecnologías y los procesos laborales evolucionan rápidamente, lo que obliga a las personas a capacitarse y mantenerse actualizadas. En Colombia, se estima que cerca de 4 de cada 10 trabajadores han tomado al menos un curso adicional en el último año para mejorar su desempeño laboral, según datos del Observatorio Laboral para la Educación.
Además, este proceso de formación permanente ayuda a fortalecer la confianza personal y la creatividad. Al adquirir nuevas herramientas y conocimientos, las personas pueden explorar caminos profesionales que antes no consideraban o enfrentar desafíos con mayor seguridad. Esto contribuye no solo a mejorar su desempeño en el trabajo, sino también a su bienestar emocional y calidad de vida.
Coomeva, consciente de esta necesidad de aprendizaje constante, impulsa espacios de formación y actualización que permiten a las personas expandir sus conocimientos y fortalecer sus habilidades. Estos espacios se adaptan a los intereses y necesidades de los participantes, promoviendo la autogestión del conocimiento y la búsqueda de la excelencia en cualquier etapa de la vida profesional. La formación se convierte así en un motor de crecimiento personal y colectivo.
La invitación es a no detenerse nunca en el proceso de aprendizaje. Las oportunidades para crecer están disponibles en cada esquina: desde una charla gratuita en línea hasta programas más estructurados. El reto está en tener la disposición de seguir aprendiendo y la curiosidad para explorar nuevas áreas de conocimiento. Cada paso que se da hacia el aprendizaje continuo es una inversión en el futuro.
Referencias bibliográficas:
