Emprender requiere de una determinación que sobre pasa las barreras de la incertidumbre y pone a prueba la valentía del más decidido. El éxito de un emprendedor depende en gran medida de su capacidad para enfrentar y superar los desafíos que se le presentan, por lo que se hace necesario mantener una disposición frente al aprendizaje, adaptarse constantemente y hacer más allá de lo requerido para lograr sus objetivos.
En general, la liquidez financiera y las posibilidades de financiación son retos mayores, convirtiéndose en un gran obstáculo para cualquiera que desee emprender. Ante este escenario, son varias las vías de solución en las que se encamina el emprendedor a través de un préstamo bancario, una inversión de capital, financiamiento a través de familiares y amigos y en el peor de los casos: pagando excesivas sumas de dinero, con agiotistas.
En cualquiera de los casos, lo más recomendable es integrar la solución financiera con una asesoría, que le permita al emprendedor rentabilizar estos recursos y reducir al máximo, el riesgo de malas practicas financieras.
Otro de los desafíos que enfrentan los emprendedores es el descubrimiento de nuevos mercados. En este caso, el emprendedor debe tener una buena comprensión de la industria, los competidores y el mercado en el que desea entrar. Debe ser prioritario, realizar una investigación exhaustiva para identificar el mejor lugar o canal para comercializar sus productos o servicios. Adicionalmente, la administración de su emprendimiento deberá concentrarse en acciones y actividades planeadas, con esquemas de medición y control; que optimicen la gestión en el tiempo. El emprendedor debe establecer prioridades y apoyarse en su núcleo más cercano, el recurso humano es limitado y la exigencia de las tareas habituales; requieren inmediatez.
Uno de los mayores retos de emprender también es el descubrimiento de nuevos productos o servicios, lo que significa que el emprendedor debe tener una buena comprensión de las necesidades de sus clientes y de la competencia. Escuchar sus clientes y mantener una relación cercana, le permitirá encontrar nuevas maneras de satisfacer a sus clientes.
Es un gran reto, sin embargo aportará al desarrollo de nuevas habilidades para el emprendedor, como diseño de experiencia del cliente, reingeniería y diseño de productos o gestión de proyectos. Por último, uno de los mayores retos de emprender también es la gestión de recursos humanos, lo que implica la generación de cultura organizacional, el desarrollo de empleados y una alta motivación. Socializar los objetivos trazados por la empresa, expresar claramente las metas con su respectivo modelo de recompensas será de gran apoyo.
Superar todos estos desafíos no será fácil, se requiere de una fuerza interior que mantenga la motivación y la disciplina en niveles elevados. Emprender requerirá mantener la disposición para tomar riesgos, establecer prioridades y buscar asesoramiento financiero, en pro de tomar las decisiones adecuadas.
