Contar con atención médica oportuna cuando se padece una situación grave para la salud es el anhelo de cualquier persona, sin embargo, esto a veces no ocurre como se espera por diferentes factores de las empresas prestadoras del servicio, que van desde la capacidad de atención hasta la calidad de sus productos y servicios médicos.
Esa es una de las razones por las que tener un programa de atención domiciliaria es una decisión acertada para cuidar tu salud de manera preventiva y tener un respaldo ante una eventualidad. Pero, ¿sabías que los programas de atención domiciliaria funcionan para situaciones de urgencia y emergencia, pese a que estas palabras no significan lo mismo?
Usualmente, asociamos las palabras urgencias y emergencias médicas con el mismo significado, pero son categorías con implicaciones diferentes en los servicios de salud. A continuación, te explicaremos las diferencias y cómo nuestros programas de atención domiciliaria y ambulancias son una gran opción para situaciones de gravedad, así como para cuidar preventivamente de tu salud.
Imagina que estás en casa realizando actividades cotidianas en compañía de un familiar que es menor de edad, por ejemplo tu hijo o sobrino, y mientras él jugaba tuvo un accidente que le generó un golpe en la cabeza.
Tras el golpe, padece un fuerte dolor de cabeza que no disminuye con las horas, por lo que te despierta preocupaciones y prefieres hacer un llamado a los servicios de tu programa de atención médica domiciliaria. Este caso es el ejemplo de lo que se entiende por una urgencia, ya que es una situación apremiante y aunque se perciba como grave, no amenaza la vida del paciente.
Sin embargo, una urgencia puede transformarse en una emergencia.
Retomando el ejemplo anterior, si los síntomas del menor empiezan a tornarse más graves luego del accidente, como sangrados, dificultades para respirar, entre otros; podría tratarse de una complejidad que de no ser tratada oportunamente evoluciona a una emergencia y pone en riesgo la vida del paciente.
La definición de urgencia médica en Colombia está delimitada en el decreto 412 de 1992 y corresponde a la “alteración de la integridad física y/o mental de una persona, causada por un trauma o por una enfermedad de cualquier etiología que genere una demanda de atención médica inmediata y efectiva tendiente a disminuir los riesgos de invalidez y muerte”.
Las emergencias, en cambio, conllevan un elevado riesgo vital y la OMS lo define como “aquel caso en que la falta de asistencia conduciría a la muerte en minutos”.
Como puedes notarlo, la diferencia entre urgencia y emergencia no es lejana y depende de las situaciones, respuestas oportunas y acceso a servicios médicos de calidad.
Otro ejemplo más común es padecer apendicitis: los dolores iniciales motivan la asistencia médica por urgencias, pero dependiendo del diagnóstico, atención y tiempos de espera, esta dolencia puede evolucionar a una perforación o peritonitis, que puede poner en riesgo la vida del paciente, es decir, una emergencia.
La atención de urgencias médicas en Colombia está establecida en el Sistema de Emergencias Médicas que fue regulada mediante la Resolución 926 de 2017, y es el modelo con el que se garantiza la respuesta oportuna a las personas que estén padeciendo una situación de salud de urgencias.
Este sistema determina cómo debe funcionar la atención de urgencias para pacientes víctimas de enfermedades, accidentes de tránsito, traumatismo o paro cardiorrespiratorio, entre otras circunstancias o patologías. También implican las relacionadas con salud mental y odontología.
Al llegar a los servicios de urgencias, los pacientes son clasificados por el sistema triage, que determina la prioridad en la atención.
La prioridad Ie corresponde a las emergencias, que son los pacientes “que presentan una condición que amenaza la vida y requiere una intervención médica inmediata”, y la prioridad II corresponde a una urgencia, que son los casos en que los pacientes tienen “estabilidad ventilatoria, hemodinámica y neurológica, cuyo problema representa un riesgo potencial de amenaza a la vida o pérdida de una extremidad u órgano, en caso de no recibir una intervención médica rápida”.
Entonces, ¿cómo te apoyan los programas de atención domiciliaria y ambulancia en estos casos?, te invitamos a seguir leyendo para conocer los detalles.
Si bien la atención en servicios de urgencia es obligatoria para todos los colombianos en cualquier parte del país y por parte de todas las entidades de salud, sean públicas o privadas, tener un programa de atención domiciliaria y ambulancia es la mejor alternativa que asegura una respuesta más efectiva para cuidar de tu salud.
Los programas de atención domiciliaria y ambulancia, dependiendo de la empresa que los brindan, reducen el tiempo de atención en servicios de urgencias y facilitan mayor agilidad en diagnósticos y exámenes para evitar que las dolencias evolucionen en emergencias que pongan en riesgo tu vida o la de tus seres queridos.
Por ejemplo: el programa CEM te permite acceder a una amplia red de servicios como atención domiciliaria 24/7, atención de urgencias y emergencias, traslados en ambulancia, y servicios de Teleconsulta con especialistas.
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Referencias bibliográficas:
(s.f.) Sistema de Emergencias Médicas. Ministerio de Salud y Protección Social. https://www.minsalud.gov.co/salud/PServicios/Paginas/Sistema-de-emergencias-medicas-SEM.aspx
(s.f.) Emergencias en Colombia. Ocha Colombia. https://wiki.salahumanitaria.co/wiki/Emergencia
Vanegas, C. y Restrepo, S. (2021). ¿Sabes qué es una urgencia? Universidad del Rosario. https://www.urosario.edu.co/Periodico-NovaEtVetera/Salud/Sabes-que-es-una-urgencia/