La naturaleza, con su evolución, adaptaciones y numerosas especies, proporciona lecciones que tienen gran aplicabilidad en los negocios y emprendimientos.
El progreso en los emprendimientos se asocia con la capacidad de volar y, por esa razón, se establecen analogías de las capacidades de especies voladoras con las capacidades de un emprendedor exitoso. En la naturaleza existe una especie que, por contextura, peso, volumen, cantidad de alas y por su extraña forma de volar, ha generado gran curiosidad: el escarabajo.
Los científicos llevan muchísimos años estudiando el vuelo del escarabajo y analizando su forma, tamaño, peso, alas, y han llegado a la misma conclusión: el escarabajo no puede volar; sin embargo, ¡lo hace!
La ciencia indica que es imposible físicamente que el escarabajo vuele por su dotación, peso y aerodinámica, pero lo que todos sabemos es que sí vuela.
El escarabajo está en la mente de ingenieros y emprendedores como un referente para lograr y crear grandes cosas.
La gran pregunta que surge con respecto al escarabajo es: ¿por qué vuela? Y la respuesta es sencilla: vuela porque no sabe que no puede volar. Y no solo vuela, sino que no dejará de volar por más que la ciencia indique que no puede hacerlo. Eso es porque el escarabajo no conoce las palabras y no tiene ninguna voz interior que le diga que no puede hacerlo, ni intentarlo, o que nunca lo logrará, ni tampoco ninguna voz exterior que le diga que no es capaz, que no puede hacerlo o que nadie lo ha logrado.
Además de “no conocer las palabras” que te impidan avanzar, se aconseja a los emprendedores que, para alcanzar el éxito, desarrollen cualidades del escarabajo como:
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Referencia
Tamisiea, J. (2022). El vuelo de los escarabajos. Investigación y Ciencia, (547), 4-4.
