En medio de agendas apretadas, pantallas constantes y entornos urbanos cada vez más saturados, el contacto con la naturaleza se convierte en una necesidad vital. Numerosos estudios han demostrado que pasar tiempo en espacios naturales no solo relaja y revitaliza, sino que también tiene efectos profundos sobre nuestra salud física, mental y emocional.
Caminar por un bosque, respirar aire puro en la montaña, contemplar un atardecer desde la playa o simplemente pasar una tarde en un parque, disminuye los niveles de cortisol (hormona del estrés), regula la presión arterial y mejora el estado de ánimo. La conexión con la naturaleza restaura la atención, reduce los síntomas de ansiedad y depresión y potencia la creatividad.
Japón, por ejemplo, ha promovido por décadas el “shinrin-yoku” o baño de bosque, una práctica que invita a sumergirse con los sentidos en entornos naturales como forma de medicina preventiva. Este concepto ha ganado popularidad en muchos países, reforzando la idea de que no se trata solo de salir a caminar, sino de hacerlo conscientemente, sintiendo el entorno, escuchando los sonidos del bosque, conectándose con la tierra.
En Colombia, un país privilegiado por su diversidad geográfica y riqueza natural, tenemos acceso a múltiples ecosistemas: selvas, montañas, ríos, desiertos, páramos y playas. Estos espacios ofrecen escenarios ideales para el descanso, la contemplación, el deporte y el turismo consciente. Desde caminatas ecológicas hasta excursiones rurales, el contacto con estos entornos no solo beneficia al cuerpo y la mente, sino que también fortalece nuestra identidad y compromiso ambiental.
Coomeva Recreación ha incorporado este enfoque en sus programas de bienestar, brindando experiencias al aire libre que promueven el equilibrio integral de sus asociados. Retiros campestres, viajes ecológicos, jornadas de senderismo, yoga al aire libre y actividades en entornos naturales hacen parte de su oferta, con el propósito de reconectar a las personas con su esencia y con el mundo que las rodea.
Incluir la naturaleza en nuestra vida cotidiana no requiere grandes desplazamientos. Bastan pequeños hábitos como llevar las reuniones familiares a un parque, hacer una pausa diaria en un espacio verde, cultivar plantas en casa o aprovechar las salidas de fin de semana para explorar nuevos paisajes. Estos momentos de reconexión con el entorno natural son fundamentales para mantenernos emocionalmente equilibrados y físicamente activos.
En definitiva, la naturaleza es medicina, es refugio y es maestra. Nos recuerda que somos parte de un todo y que para cuidar de nosotros mismos también debemos cuidar del planeta.
Vive experiencias al aire libre, reconéctate con lo esencial y mejora tu bienestar. Conoce la oferta de Coomeva Recreación y Turismo y participa en nuestras actividades pensadas para ti y tu familia.
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