Cuando vamos a emprender, una de las variables que consideramos más importantes es el capital para iniciar nuestro proyecto. No siempre es necesario contar con una gran cantidad de dinero para iniciar. Pero sí se necesita una inversión inicial, entre las opciones para obtenerla está el capital semilla.
Esta es una fuente de financiación utilizada por los emprendedores que empiezan a crear una compañía desde ceros. Así pues, el concepto de capital semilla es la inversión que se usa para gestar y hacer crecer un negocio. Es decir, es un apalancamiento financiero para la creación de empresas nuevas, startups y proyectos de emprendedores.
Este tipo de financiamiento se considera un “capital de riesgo”, pues es dinero que puede perderse o no generar rentabilidad.
Así lo consideran los inversionistas, porque existe una incertidumbre sobre la viabilidad económica de la empresa y el posible retorno de la inversión.
A diferencia de un apalancamiento con la banca tradicional, el dinero debe provenir de alguna (o algunas) de las siguientes fuentes:
Muchas veces, este dinero se utiliza para diversas fases de la creación de la empresa. Por ejemplo, hacer estudios de mercado o desarrollar una idea de algún producto o servicio. También, para crear un plan de negocios, definir la actividad de esta nueva empresa y estudiar la viabilidad del negocio.
A continuación, exponemos las principales ventajas y desventajas de usar este tipo de financiación.
Al obtener una inversión informal, puedes obtener ventajas que otros sistemas de financiación no utilizan. La principal ventaja del capital semilla, evidentemente, es el aporte en conocimientos y experiencias de los inversores, especialmente de los ángeles inversores. Pues estos tienen una amplia experiencia para desarrollar innovaciones.
Otra ventaja se relaciona con el dinero necesario para iniciar. Por lo general, en las primeras fases de un emprendimiento no se necesitan cantidades exorbitantes de dinero. En ese sentido, es más fácil conseguir fondos, ya que la inversión es baja en comparación a la de una empresa consolidada, la cual está en búsqueda de capital sustancialmente mayor.
Aunque conseguir inversión no es una tarea fácil en las primeras etapas, es más fácil obtener un monto bajo de diferentes fuentes que de una empresa del sistema financiero. Además, obtener una gran cantidad de dinero de entrada no implica que sea mejor, pues las deudas también serán grandes.
Adicionalmente, no necesitas contar con un amplio historial crediticio. Los inversores, al no ser la banca tradicional, te pueden apalancar sin revisar tu pasado de crédito.
Al no ser inversores profesionales habrá algunos desafíos, como lidiar con personas que hayan invertido y quieran un retorno de capital más pronto de lo esperado, o que deseen que pagues intereses más altos, entre otros.
Por su parte, los amigos, familia y emprendedores suelen invertir sin conocer su papel dentro de la empresa. A veces no tienen en cuenta que pueden perder su inversión y, si esto pasa, pueden generar conflictos.
Los ángeles pueden interferir de más en los proyectos, ya que querrán cerciorarse de que su inversión de frutos. En esas primeras fases en las que no se encuentra un negocio robusto, se debe ajustar el rumbo continuamente.
Por ello, puede que este ángel quiera intervenir en muchas facetas, como en la gestión y el funcionamiento del negocio.
Tendrás accionistas, es decir, solo mantendrás una proporción de las acciones. Al principio, en las primeras fases del proyecto, el negocio poco o casi nada vale. Así que la proporción de la empresa que se deberá aportar o dejar a disposición del inversor es más grande, se obtendrás capitales pequeños.
Se puede buscar financiación más tradicional con factoring u otro tipo de crédito. Allí deberás pagar cuotas, por lo que tendrás que acogerte a producir rentabilidad desde muy pronto. En este caso sería financiación tradicional (con el sistema financiero) y no capital semilla.
De manera que este tipo de financiación para un emprendimiento puede ayudar a apalancar el negocio y darle ese primer empujón financiero. Sin embargo, trae sus riesgos y consecuencias.
Así que, al momento de buscar dinero, se deben evaluar los factores a favor y en contra. Qué posibilidades de éxito hay y cómo lograr un equilibrio que permita obtener dinero y a la vez libertad.
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