La práctica de la actividad física y deportiva es una herramienta clave para la prevención de las Enfermedades Crónicas No Transmisibles (ECNT), que son la principal causa de consulta médica en nuestro país. La evidencia actual destaca los beneficios para la salud de la actividad deportiva, como ciclismo, fútbol, balonmano, atletismo y natación.
Más allá de los deportes específicos, las asociaciones médicas y la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomiendan caminar como una intervención de alta efectividad y bajo costo para la salud. A partir de esta recomendación, surgen inquietudes sobre las características de las caminatas y cómo obtener sus beneficios.
Un metaanálisis con datos de más de 175 mil personas/año y 2.310 casos de mortalidad reportó una reducción del 12% en la mortalidad por todas las causas, incluyendo la cardiovascular, por cada incremento de 1.000 pasos diarios. En mayores de 70 años, la reducción fue del 13%, y en estudios controlados por intensidad del paso, del 8%.
Se evidenció una asociación inversa entre el número de pasos y la mortalidad, observando una reducción del riesgo entre los 2.700 y 17.000 pasos diarios. Otro metaanálisis con más de 220 mil personas sanas o con riesgo cardiovascular reportó una asociación inversa a partir de 3.867 y 2.337 pasos diarios, respectivamente.
En conclusión, incluso un aumento modesto de 500 a 1.000 pasos diarios puede asociarse con un menor riesgo de muerte. La estrategia más simple y eficiente es promover el incremento de pasos diarios como una herramienta de prevención de ECNT y reducción del riesgo cardiovascular.
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