Diseño de interiores: los colores adecuados para tus espacios

El diseño de interiores es el arte de creación de espacios y de estudio de los espacios existentes para disponer de los muebles, de tal modo que puedan añadirse telas y accesorios armónicamente. 

El color es uno de los aspectos más importantes en el momento de decorar un interior, puesto que los colores que elijas para las paredes, tapizados y alfombras no solo determinarán el ambiente, sino que influirán en tu estado de ánimo y pueden ser usados incluso para crear ilusiones de tipo óptico.

Una habitación o espacio puede parecer más grande o más pequeño dependiendo del color que utilicemos para:

1. Para crear la sensación de más espacio y amplitud, se usan colores pálidos y fríos. 

2. Para lograr un efecto llamativo, se utilizan colores fuertes tanto en techo como en paredes. 

3. Un ambiente acogedor se usa un color más claro en techo y más oscuro en paredes. 

4. Para crear la ilusión óptica de un espacio más grande, se usa en el techo el mismo color que en las paredes, pero en una tonalidad más clara.

Los colores incidirán también en el carácter de los habitantes de los espacios: (GUTIÉRREZ, P. M.; 2010). 

• El color amarillo, actúa como estimulante de la actividad cognitiva.

• El naranja, se recomienda en espacios que reciben poca luz natural. Este color estimula la digestión y el apetito, por lo cual es altamente recomendable para cocinas, comedores y restaurantes. El naranja, además, estimula la creatividad y sociabilidad.

• El azul, se recomienda bastante en las habitaciones y baños, porque brindan un ambiente de paz. Se debe evitar su uso en exceso porque puede causar depresión, por lo cual se debe combinar con amarillo y naranja.

• El color rosa, se recomienda para habitaciones y baños porque es relajante.

• El verde, genera sensación de mayor espacio y es tranquilizante.

• El blanco da la sensación de frío y aislamiento, por lo que se debe usar para resaltar otros colores.

En cuanto a la combinación de los colores, debes tener en cuenta que los colores se clasifican generalmente como cálidos y fríos. Los colores cálidos son: amarillo, rojo, beige y naranja; sugieren glamour, pero no se deben usar con una tonalidad muy intensa, porque proyectan la sensación de un espacio más pequeño. Los colores fríos: azul, verde, gris y violeta, crean un ambiente de libertad. Estos colores son ideales para espacios muy soleados.

Para que un espacio interior sea armonioso, debe incluir tanto colores calientes como fríos. Como regla importante, equilibra los espacios coordinando los colores y creando continuidad de un espacio a otro en su hogar. Evita errores en la combinación de colores usando la rueda de colores para elegir tonos que combinen. 

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Referencia 

GUTIÉRREZ, P. M. (2010). El color en el diseño de interiores. CSIF Revistas, 1-10