
En uno de sus libros, MINDFULNESS: LA ATENCION PLENA, Ellen Langer explica que el ejercicio y meditación ofrecen beneficios superiores: reducen ansiedad, mejoran la resiliencia emocional y aumentan la motivación. Ella es reconocida como la “madre de la atención plena”. Recomienda adoptar el mindfulness desde una perspectiva psicológica, no necesariamente espiritual.
Profundiza que la incertidumbre es una constante, no una excepción y con
esta interpretación, estar en el momento presente nos da la capacidad de vivir
conscientes y estables, aunque no hay seguridad en los pasos siguientes, la
incertidumbre nos ayuda a prestar atención a cada evento, para tratar de
entenderlo. Eso ejercita nuestra mente y nos lleva a manejar el estrés porque
dejamos de creer en absolutos y abrimos nuestra mente a entender todo lo que se
nos pueda presentar.
En la actualidad, la mayoría de los trabajos implican elevados niveles de presión, lo que puede conducir a ansiedad, insomnio, fatiga crónica e incluso enfermedades cardiovasculares.
El estrés entonces no solo afecta el estado mental, también está relacionada con
enfermedades, como la diabetes, la obesidad o trastornos del sueño. Sin
embargo, el ejercicio y la meditación surgen como una alternativa efectiva o como
método de manejo.
La actividad física puede atenuar el estrés biológico en contraste a los
pensamientos negativos y repetitivos que genera el estrés. Conectar cuerpo y
mente de manera positiva ayuda a reinterpretar tareas percibidas como
amenazas.
“la mayoría utilizamos soluciones de ayer para resolver los problemas de
hoy”
Cuando nuestra mente lo cree todo aprendido, se bloquea y no se abre a la
posibilidad de aprender. Entender que no hay cosas buenas o malas, nos permite
vivir libres y en consecuencia excluir el estrés del día a día.
“Si no haces mas que preocuparte, preocuparte es perder el tiempo”, toma
acción, cambia lo que esta en tus manos, no solo basta con la preocupación
porque lleva al estrés.
El estrés se base en dos cosas: la suposición de que algo va a suceder y que
cuando suceda será terrible, esto no puedes predecirlo porque la certidumbre es
una ilusión.
Los eventos en si mismos no causan estrés, lo que realmente causa el estrés
son las visiones que tienes del evento, por esto ella recomienda buscar ventajas
sobre cualquier evento, priorizando las ventajas sobre las desventajas, no nos dice
que seamos soñadores, lo que nos dice es que donde ponemos nuestro enfoque
es en lo que trabajamos.
Muy similar a la metáfora del lobo bueno y el lobo malo, al lobo que alimento se
convierte en el lobo más fuerte.
Conclusión
El estrés no se elimina de la noche a la mañana, sin embargo, el efecto placebo
puede traer beneficios, encontrar la parte buena, aunque el reto tenga sus partes
negativas, lleva nuestros esfuerzos en ese propósito.