Cuando tomas la decisión de emprender debes saber que no es un camino sencillo, sin embargo existen algunos pasos que puedes tener en cuenta para que alcanzar tu sueño sea más sencillo y puedas estar preparado para los imprevistos que surjan en el proceso. Por eso hoy te traemos una guía rápida sobre cómo emprender un negocio, para que puedas reconocer los momentos por los cuales vas a pasar en tu trayecto hacia la independencia económica:
En esta primera etapa no solo tienes una gran idea, sino que también analizas todas esas ideas no tan buenas que pasaron por tu cabeza al pensar en tu proyecto. Esto lo debes hacer muy cuidadosamente para tener en cuenta diferentes opciones para tu emprendimiento y de esa forma definir cuál será esa idea de negocio que elegirás para continuar tu camino.
Una vez defines cuál será el norte de tu emprendimiento debes hacer un estudio de mercado que te permita conocer la viabilidad de tu proyecto, pues es muy importante reconocer a qué demanda responde tu producto o servicio y estar al tanto de qué tanta competencia encontrarás en el camino.
Para que un emprendimiento sea exitoso debe contar con bases sólidas, y este es el momento donde debes crearlas. En esta parte del proceso es cuando tienes que prepararte para que tu negocio cuente con todo lo necesario para triunfar, como por ejemplo el tema legal: ¿Qué impuestos aplican para tu idea? ¿Cuáles son los pagos obligatorios que debes hacer?
Una vez definido todo lo anterior puedes pasar a la parte económica, es decir definir de dónde saldrán los recursos para llevar a cabo la idea. Para esto puedes buscar personas interesadas en invertir o algunos interesados en crear una sociedad. Y hablando de trabajar con más personas, en este punto también debes considerar si es necesario tener más personal para el proyecto y revisar si cuentas con las condiciones necesarias para contratarlos.
Finalmente debes buscar también los recursos materiales para tu emprendimiento, ya que debes estar preparado en caso de que todo vaya bien y debas responder a grandes pedidos.
¡Listo para que todos conozcan tu proyecto! Es momento de mostrarle al mundo tu idea y que se antojen de comprarla, y para ello debes aprovechar las herramientas que más se acoplen a tus necesidades.
Actualmente contamos con un gran beneficio para los nuevos emprendedores y es la facilidad que existe de mostrar los productos o servicios que ofrecen a través de las redes sociales. Puedes hacer uso del SEO para posicionar tu emprendimiento en los diferentes motores de búsqueda si cuentas con una página web o usar la pauta en redes para llegar a un mayor número de público.
Una vez se logra despegar los pedidos aumentan, el tiempo es más corto y muchas veces las manos no dan a basto, y es en ese momento donde se debe considerar expandirte, y esto no significa hacerlo solo con el personal, también es importante pensarlo desde las necesidades del mercado. Todo comienza con la pregunta ¿Qué más puedo ofrecer con mi emprendimiento?
En esta última parte del proceso es cuando miras atrás y dices “Me siento orgulloso”, porque los avances son innegables y ya puedes sentir cómo la libertad financiera ahora hace parte de tu vida, aunque las responsabilidades hayan aumentado.
Es aquí donde se debe considerar si lo correcto es quedarse por un tiempo en el lugar donde estás o lo mejor es aspirar a alcanzar nuevos horizontes, como puede ser expandirse de manera internacional.
Sin importar lo difícil que sea atravesar cada una de estas etapas, es crucial comprender que en cada una de ellas se viven nuevas experiencias y diferentes emociones. Es completamente válido tener miedo, pero es crucial recordar que si no nos atrevemos a dar el primer paso podemos estar perdiendo una gran oportunidad de crecer con nuestros emprendimientos ¡Atrévete a comenzar!