En muchas familias, hablar delante de los niños sobre dinero es inadmisible, y no les permiten participar en conversaciones sobre este tema, ni aun cuando van creciendo.
Los adultos deben ser conscientes que deben transmitir a sus hijos no solo hábitos alimenticios y de higiene, tienen que hablar con ellos de otros temas con el paso del tiempo, como sexo y drogas, entonces por qué no les enseñas desde pequeños sobre el manejo del dinero, sé consciente que esta herramienta la van a requerir todos los días de su vida.
Las decisiones de tipo económico, las tomamos todos los días y a todas horas, así que cuéntales a tus hijos cuánto ganas y el dinero que gastas mensualmente para cubrir las necesidades básicas. Una buena forma de involucrar a los niños desde pequeños en las decisiones económicas, es el día de su cumpleaños, invítalo a que te ayude a realizar un presupuesto para ese día y compromételo a elegir las cosas más importantes con el dinero que hayas destinado para esa celebración.
Es muy importante que les muestres las facturas a tus hijos, para concientizarlos de lo que se gasta.
La relación que tus hijos tengan con el dinero va a depender bastante de la relación que tú tienes con el dinero, ya que actitudes negativas de tu parte, les generan bloqueos y la creencia que son pobres y que seguirán siéndolo cuando sean mayores. Para que esto no ocurra, evita expresiones como: “No tengo dinero”. No se trata de engañarlos, simplemente puedes explicarle de otra forma porque no les vas a comprar los que ellos quieren, con otras expresiones como: “lo que quieres no es necesario”, “no es apropiado para tu edad”, “ya tienes muchos juguetes, objetos y/o ropa parecida a eso que quieres” o “que más adelante se puede comprar”.
Los niños como consumidores, se clasifican en cuatro categorías: