Hablar de éxito suele ser subjetivo, pues depende del resultado que cada uno espera y aplica en cualquier aspecto de la vida, ya sea personal o profesional, requiere una dirección clara y un plan de acción definido.
Sin embargo, lo que observo en el día a día es que muchos quieren lograr algo pero no son claros, ni específicos y para lograr el “éxito” en lo que sea que te has propuesto, es necesario establecer metas inteligentes y efectivas; más conocidas como objetivos SMART son un enfoque probado y eficiente que te ayudará a alcanzar tus objetivos de manera satisfactoria.
Primero lo primero, y es que SMART es un acrónimo que se ha utilizado para trazar objetivos y básicamente representa las características clave que deben tener tus objetivos para que se cumplan y sean efectivos. Esta sigla está pensada en inglés y cada letra tiene un significado específico:
Específicas (Specific): los objetivos deben ser claras y concretas. Definir con precisión lo que deseas lograr te permite enfocar tus esfuerzos y evitar la ambigüedad. Y un ejemplo que menciono en la gran mayoría de mis conferencias es “voy a vender más”, es lo que me dicen la mayoría de empresarios cuando pregunto cual es su meta para el año en curso, pero… ¿cuánto? vender más no es una meta específica y clara, ¿quedarías satisfecho si te vendes 10 millones en 2022 y cierras 2023 con ventas por $10.001.000? apuesto que no, por eso debemos ser claros y concretos a la hora de definirlas.
Medibles: tus objetivos deben ser cuantificables. Establecer indicadores concretos te permitirá evaluar tu progreso y saber si estás en el camino correcto; al hablar de estos temas tendemos a pensar que solo funciona con empresas grandes, sin embargo, es necesario que definas con datos lo que esperas, como ejemplo, a diciembre 31 de 2023 se incrementarán las ventas en un 30% comparado con el año inmediatamente anterior.
Alcanzables: los objetivos deben ser realistas y alcanzables. Es esencial que sean desafiantes, pero también factibles, para que no te desalientes en el proceso y es que a veces solemos ser muy conformistas o muy soñadores, en ocasiones nos ponemos metas muy elevadas y a corto tiempo, y es probable o que no se cumplan y que esto nos genera frustración y abandono del proceso.
Relevantes: los objetivos deben estar alineadas con tus valores, objetivos más amplios y contexto actual. Asegúrate de que sean relevantes para tu crecimiento personal o profesional.
Temporales: tus metas deben tener un plazo específico para su logro. Establecer un marco de tiempo te ayudará a mantener la disciplina y la motivación.
Tanto para nuestros emprendimientos y a nivel personal la importancia de los objetivos SMART radica en obtener un enfoque claro y preciso porque logramos definir con exactitud lo qué se quiere lograr, así mismo permite concentrar los recursos y esfuerzos en actividades relevantes y productivas, evitando divagar o perderse en objetivos ambiguos.
Desde mi punto de vista, también se convierten en un impulso para la motivación y la persistencia, creamos autodisciplina con nuestros sueños, nos permitimos medir nuestro progreso y lo podemos poner en práctica con muchas técnicas como el mapa de sueños, el libro de vida, objetivos estratégicos, entre otros. Para concluir, definir objetivos SMART contribuye al crecimiento personal y profesional. Solo debemos tomar acción y disfrutar el proceso.