En los últimos años las actividades turísticas asociadas al montañismo y la nieve han venido tomando bastante popularidad en nuestro país. Este auge se ha dado, en parte, gracias a la viralización de los contenidos creados y difundidos sobre estos ecosistemas en redes sociales.
Y con toda razón, ¿A quién no le gustaría visitar increíbles paisajes montañosos, caminar sobre el hielo, ver un amanecer en la cumbre de un nevado y volver a casa con postales de película? A una gran mayoría, por supuesto.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que este tipo de actividades tienen un alto esfuerzo físico y requieren de una preparación e indumentaria especial. Sigue esta lista de recomendaciones para que tus planes en la montaña sean lo más exitosos posibles.
Una agencia te garantizará la logística para que tu viaje sea exitoso, te proporcionará todos los equipos de protección en la montaña, así como el acompañamiento en el recorrido de guías especializados y la asistencia ante cualquier eventualidad.
Las actividades de alta montaña y nieve tienen un riesgo muy alto si decides realizarlas solo, esto sin contar que en muchas de las áreas protegidas es necesario contar con el acompañamiento de un guía, por disposición de las autoridades ambientales. Es por esto que siempre debes tomar este tipo de viajes con agencias autorizadas por Parques Nacionales y que cuenten con registro nacional de turismo (RNT) ante Confecámaras.
Los viajes de montaña tienen una alta exigencia física, es por esto que siempre debes tener una preparación deportiva previa adecuada. Consulta siempre las condiciones del terreno que vas a visitar, la distancia de los recorridos y el clima al que te vas a enfrentar para que realices actividades de entrenamiento que te permitan dar lo mejor de ti y lograr tus objetivos en cada experiencia.
Los expertos recomiendan combinar ejercicios cardiovasculares con fortalecimiento muscular, así como preparar el cuerpo subiendo pequeños cerros cerca de casa con un morral que simule el peso que llevaríamos en nuestra expedición.
En este tipo de viajes es común que haya que levantarse temprano algunos días para iniciar los recorridos, además de que algunas personas no logran descansar bien por las condiciones particulares de cada lugar de hospedaje.
Es por esto que debes descansar muy bien al menos una o dos semanas antes del viaje, garantizando un sueño diario de siete u ocho horas sin trasnochar ni consumir bebidas alcohólicas o sustancias psicoactivas. Además, es importante mantener una alimentación balanceada, con énfasis en carbohidratos, la semana previa al viaje.
Ten en cuenta que los ecosistemas de alta montaña son de clima muy cambiante, por lo que debes ir siempre preparado para la lluvia, ya sea con carpa/poncho de lluvia o ropa impermeable y raincover para tu morral. Para caminar en la montaña se recomienda usar ropa de secado rápido y transpirable, además de calzado cómodo y con buen agarre. Los guayos tradicionales o zapatos especiales para montaña siempre serán la mejor opción en condiciones normales, pero si el terreno está muy mojado y pantanoso, se recomienda usar botas pantaneras para evitar mojar los pies.
En los momentos de mayor frío, como el paso por el páramo o el intento de cumbre, se debe vestir con el sistema de las tres capas. La primera es interior, pegada a la piel, de camisetas o buzos y licras deportivos. Debe ser de materiales delgados y transpirables. La segunda debe aportar calor, en este caso se recomiendan prendas como polares o softshell. La tercera capa debe ser de materiales impermeables, transpirables y de secado rápido, ya que su función es impedir el paso de la lluvia, viento y nieve, al tiempo que evacúan la humedad del interior. Y, por supuesto, no olvides los guantes impermeables y medias térmicas.
Seguro querrás empacar muchas cosas que crees necesitar en la montaña. Y sí, es cierto, hay que ir muy bien preparados, pero sin exagerar, ya que el espacio en la maleta siempre será limitado. Siempre pregunta a tu agencia qué necesitarás en el viaje específico que vas a realizar.
Algunas de las cosas comunes de todas las experiencias son: hidratación (mínimo 2 litros), gafas con protección UV, bastones de trekking, protector solar para rostro y labios, gorra o pava, medicamentos esenciales y personales, bolsa para desechos personales, documentos de identificación, y snacks como chocolatinas, bocadillos, maní y galletas integrales.
Vamos a romantizar un poco. Un guía es como tu mamá o tu profe en la montaña, ya que está encargado de cuidarte, llevarte por el buen camino y, si es necesario, llamarte la atención sobre algo que estás haciendo mal. Los guías son los conocedores del terreno, quienes tienen experiencia en el campo y están preparados profesionalmente para actuar ante cualquier eventualidad, así que sigue sus recomendaciones para que vayas siempre seguro y minimices los riesgos de este tipo de actividades.
En todos los viajes de este tipo estarás inmerso en paisajes increíbles, pero con ecosistemas muy frágiles y, gran parte de ellos, dentro de reservas de la sociedad civil o áreas protegidas a cargo de Parques Nacionales.
No te desvíes de los senderos demarcados, no extraigas vegetación ni animales del entorno, no orines o defeques cerca de fuentes de agua y no arrojes basuras al suelo. Todo lo que lleves a la montaña debe regresar contigo. Para esto, carga siempre una bolsa para disponer tus basuras.
La montaña es un lugar para encontrarse consigo mismo, pero también con otras personas. Este tipo de viajes funcionan con una dinámica de trabajo en equipo, en que el grupo siempre está unido, por lo que es un muy buen momento para hacer nuevos amigos. Encontrarás muchos aventureros como tú, con la misma pasión por este tipo de planes, así que compórtate siempre cálida y respetuosamente, ya que ellos son tu equipo y apoyo durante tu viaje en la montaña.
Esto no es un paseo de olla cualquiera, ni un lugar de descanso con vista a la playa o de rumba, con bulla y excesos. Es un espacio para retarse física y mentalmente, apreciar la naturaleza y aportar a su conservación.
La alta montaña está llena de una magia especial que solo entiendes hasta estar en ella. Sé humilde y disfruta el camino, porque el paisaje es cambiante, cada visita será diferente y no siempre la montaña te permitirá llegar hasta su cima. Aplica siempre esta frase típica entre montañistas: “La verdadera cumbre está en casa”.
Esta es la lista de expediciones en las que puedes conocer la nieve en Colombia. Actualmente, nuestro país cuenta con seis glaciares: tres de ellos (Santa Isabel, El Ruiz*, y Tolima) en el Parque Nacional Natural Los Nevados y los otros tres en el Volcán Nevado del Huila y las sierras nevadas de El Cocuy y Santa Marta. Los cuatro que se enumeran a continuación son los lugares en los que está permitido el acceso por Parques Nacionales Naturales.
1. Glaciar Conejeras, Volcán Nevado Santa Isabel (Borde del glaciar)
2. Púlpito del Diablo, Sierra Nevada del Cocuy (Borde del glaciar)
3. Cumbre del Volcán Nevado Santa Isabel
4. Cumbre del Volcán Nevado del Tolima
*En el Volcán Nevado del Ruiz, debido a su nivel de actividad, solo está permitido el acceso hasta el sitio conocido como el Valle de las Tumbas, a 4540 msnm. Es un lugar con un espectacular paisaje lunar y con una vista increíble dependiendo del clima, pero debes tener en cuenta que en este sitio ya no se cuenta con glaciar. Solo muy pocas veces en el año, durante la temporada fría, se pueden apreciar algunas nevadas.
Fuentes: Parques Nacionales Naturales y Volcano Adventures, agencia de viajes especializada en actividades de alta montaña.