Para los jóvenes que anhelan tener su propia vivienda, la compra de propiedades en plano puede ser una opción atractiva. Además de la motivación por estrenar, esta fórmula brinda ventajas prácticas y financieras que facilitan el acceso y posibilitan la planificación anticipada del proyecto. Por lo tanto, saber cuáles son sus beneficios ayuda a tomar decisiones sensatas.
En primer lugar, adquirir propiedades en planos a menudo supone costos más bajos que las construidas. Los promotores brindan precios promocionales o descuentos de lanzamiento en las primeras etapas, lo que posibilita garantizar una propiedad a un precio por metro cuadrado más competitivo. Por lo tanto, el comprador de menor edad tiene la posibilidad de acceder a mejores condiciones iniciales y aumentar su capacidad adquisitiva.
Además, el pago dividido y los plazos de entrega ayudan a la planificación financiera. Es común que, cuando se adquiere un inmueble en construcción, la cuota inicial y los pagos subsiguientes se distribuyan a lo largo del tiempo. Esto permite ahorrar y planificar el presupuesto sin desembolsar todo de inmediato. Por ende, esta forma disminuye la presión económica personal y posibilita que la petición del crédito se haga con más tranquilidad. Asimismo, muchos proyectos brindan opciones de financiamiento por parte del promotor, pactos con instituciones financieras y alternativas de pago que complementan la hipoteca, lo cual facilita el acceso a los que cuentan con escasos recursos. Además, es adecuado examinar los servicios y las amenidades comunitarias que contribuyen a una mejor calidad de vida.
Otra ventaja es que puedes personalizar y elegir desde temprano. Los jóvenes tienen la posibilidad de elegir la distribución, la orientación y los acabados entre las alternativas que se les brindan, lo cual ayuda a personalizar el hogar según sus necesidades. Asimismo, la selección de unidad y localización dentro del proyecto puede tener un impacto en la revalorización de la propiedad a medio plazo.
Por otro lado, la posible revalorización es un argumento importante. Si se compra en etapas iniciales, es posible aprovechar que el valor va subiendo a medida que la obra se consolida y el entorno se urbaniza; esto significa una ganancia patrimonial para quien tiene visión de futuro..
Asimismo, es común que los promotores incorporen garantías y esquemas de postventa que proporcionan seguridad: garantía por defectos, supervisión técnica y términos contractuales que disminuyen las incertidumbres y proveen al cliente mecanismos de protección.
Sin embargo, esta opción necesita precaución: comprobar la reputación del promotor, leer las cláusulas del contrato y comprender los riesgos de retrasos o modificaciones en el proyecto. Por esta razón, obtener asesoría técnica y legal optimiza los beneficios y resguarda la inversión. Te invito a conocer los proyectos de vivienda que ofrece la Cooperativa Coomeva.
