No existe una fórmula mágica que nos diga cuánto viviremos, pero, sí existen métodos o maneras que ayudan a las personas a llevar un estilo de vida saludable. Cuidar de nuestra mente y cuerpo es clave para vivir mejor, previniendo enfermedades y otras condiciones desfavorables que no queremos experimentar, así mismo los estilos de vida están relacionados con lo que cada uno de nosotros consumimos, incluyendo nuestras actividades de ocio como alcohol y drogas, los cuales pueden ser perjudiciales.
Un estilo de vida saludable se refiere a varios comportamientos o actitudes cotidianas que podemos realizar para tener mejor calidad de vida y está relacionada con aspectos como: la satisfacción de nuestras actividades y necesidades diarias, lograr nuestras metas, y realzar nuestra imagen y actitud.
Aquí te traemos algunos consejos para que nuestro estilo de vida tenga siempre una estructura sólida:
Llevar una dieta sana es un factor clave, somos lo que comemos.
Es importante consumir en equilibrio y sin excesos proteínas, carbohidratos, grasas, frutas y vegetales, evitando así al máximo las comidas chatarra. Hay que aclarar que no debemos ponernos camisas de fuerza, no está mal de vez en cuando darse gustos.
La actividad física constituye junto con una buena alimentación la estructura base de nuestro bienestar, no es necesario que te la pases en el gimnasio, para estar bien basta con realizar caminatas, montar bicicleta, practicar algún deporte o yoga durante periodos de tiempo no muy extensos.
Llevar un control de tu peso puede alertarte para poder prevenir enfermedades cardiacas, es esencial tener un peso adecuado para nuestro buen desempeño cotidiano.
Recuerda que necesitamos dormir y dormir bien, eso significa entre 7 y 8 horas diarias, si no te es posible dormir el ciclo completo de sueño haz algunas siestas cortas de máximo 15 minutos al día, descansar es vital para el buen funcionamiento de nuestro organismo.
Yo sé que esta te la sabes, pero, fumar y consumir alcohol de manera excesiva es bastante dañino. Puede afectar gran cantidad de órganos vitales para nuestro cuerpo e incurrir en enfermedades de alto riesgo.
Salir de nuestro entorno inmediato y conocer nuevos lugares contribuye a un estado de bienestar y por supuesto a un estilo de vida saludable. En nuestra cotidianidad estamos expuestos a ritmos a veces extremos que nos producen enfermedades no solo físicas si no mentales, no es necesario irnos a lugares lejanos, pues realizar pequeños recorridos en lugares diferentes, pues esto surte un efecto reparador al liberar tus tensiones.
Leer es considerado un gimnasio para nuestro cerebro, leamos lo que nos apasione más y convirtamos esto es un hábito que nos ayudará a tener nuestra mente activa y obtener muchos más conocimientos.
Estos son algunos consejos que podemos llevar a cabo para tener una vida saludable, sin embargo, no debemos hacer de estos hábitos una cárcel, podemos ejecutarlos de manera prudente, pues no se trata de sumar otra fuente de estrés a nuestra vida.
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