En la actualidad, la división de tareas en el hogar con los hijos ha dado un giro, puesto que se busca que tanto el hombre como la mujer asuman las labores de manera equitativa, donde la responsabilidad no recaiga en un solo individuo, buscando llegar a construir una equidad de género.
Esta búsqueda de equidad se ha dado debido a que generaciones atrás se llevaba una forma diferente de llevar las cosas, en la que las mujeres eran las encargadas de los asuntos del hogar, incluyendo la crianza y el cuidado de los hijos, donde era la madre quien debía asumir la comida, el aseo, la educación de los niños, incluyendo el acompañamiento en las tareas, la asistencia como acudiente a las reuniones de colegio y los demás compromisos escolares.
También, la salud, las vacunas y las citas médicas debían ser atendidas por la madre, todo esto mientras el padre trabajaba y se encargaba de llevar el sustento al hogar, para la comida, los implementos de la casa, el colegio de sus hijos y cualquier otra necesidad que requiriera un gasto, era el hombre quién debía de asumirlo. Por esta razón, se veía como un mayor mérito y de mayor esfuerzo, el trabajo del padre antes que el de la madre que no era remunerado.
Hoy en día, los roles en las familias han cambiado y poco a poco ha revolucionado el pensamiento, en donde tanto hombres y mujeres salen a trabajar, ambos se encargan del sustento del hogar, y así mismo, ambos son los responsables del cuidado y crianza de sus hijos. Cada familia establece su propio orden, y se reparten las labores de manera equitativa, ya sea que se turnen o decidan hacer siempre ciertas tareas por acuerdos mutuos.
Aquí te dejamos algunos puntos para tener en cuenta:
No solamente enfocarse en la solvencia económica de sus necesidades, sino también en la enseñanza de valores, educación y en la participación dentro de su vida cotidiana.
Ya sea que la madre salga a trabajar, haga diligencias y pague recibos, y el padre se quede con los hijos, prepare la comida, y se haga cargo de la limpieza de casa, o viceversa. Hoy en día las mujeres ya no sienten que tienen que quedarse en casa gracias al empoderamiento femenino.
Es importante que no sean únicamente los hombres.
Deben conocer cómo cambiar un pañal, hacer un tetero y estar al tanto del cuidado y las decisiones que con ellos respecta.
Para llevar a cabo un compromiso justo, en donde ambas partes sientan una equidad.
Deben repartirse el tiempo que pasan los niños con cada uno.
Tener una maternidad y una paternidad equitativa, ofrece la posibilidad de llevar un equilibrio en la relación, dejando de lado los estereotipos de género evitar frustraciones, discusiones y llevar una crianza más eficiente al contar con la presencia de ambos padres trabajando juntos para un mismo fin.
Si te interesa conocer más de este tema, puedes estar atento a los contenidos de educación, y a nuestra sección De igual a igual, aprendiendo a vivir en Equidad de género, donde encontrarás más información de maternidad, paternidad y otros asuntos relacionados.