En el dinámico mercado laboral actual, el éxito profesional no solo se mide por los conocimientos técnicos, sino por la capacidad de interactuar eficazmente con los demás, de adaptarse al cambio y de resolver problemas de manera creativa. A estas cualidades se les conoce como habilidades blandas, y se han convertido en un activo invaluable para cualquier profesional. Mientras que las habilidades técnicas (hard skills) te abren la puerta a un trabajo, son las habilidades blandas las que te permiten crecer, liderar y, en última instancia, prosperar. En un mundo donde la colaboración y la comunicación son fundamentales, cultivar estas competencias es el camino para un desarrollo profesional, sostenible y significativo.
Tradicionalmente, las empresas se enfocaban en el dominio técnico. Sin embargo, la automatización y el ritmo acelerado del cambio han demostrado que las habilidades exclusivamente humanas son irremplazables. Un estudio del Ministerio de Educación (2025) señala que el 70% de los empleadores en Colombia considera que las habilidades blandas son más importantes que las técnicas a la hora de contratar y promover a sus empleados.
La capacidad de un profesional para trabajar en equipo, para comunicar ideas de forma clara y para gestionar conflictos es lo que realmente impulsa la innovación y la productividad en cualquier organización.
Las habilidades blandas son tu mayor activo profesional, un conjunto de herramientas transferibles que te acompañarán durante toda tu carrera.
Coomeva, en su compromiso con el desarrollo integral de sus asociados, entiende el poder de las habilidades blandas. La entidad invierte en la formación de sus miembros, ofreciendo acceso a talleres y programas que fortalecen la comunicación, el liderazgo y la inteligencia emocional. Coomeva acompaña a sus asociados en el desarrollo de estas competencias esenciales, asegurando que tengan las herramientas no solo para ser excelentes profesionales, sino también para ser líderes inspiradores y colaboradores excepcionales.
Referencias