El avance tecnológico ha propiciado la aparición de toda clase de soluciones digitales. Todas ellas propicias para cada una de las necesidades de la vida diaria. En este sentido, uno de los sectores más beneficiados por el impacto de la tecnología es el sector salud. Lo anterior relacionado, principalmente, con las mejoras en productividad y automatización de procesos. Ejemplo de ello, es la integración de métodos tecnológicos y de transformación digital como la RPA.
El primer paso para entender esta tecnología es aclarar sus siglas. RPA se refiere a la automatización robótica de procesos [Robotic Process Automation]. Este método tiene como objetivo la automatización de procesos transaccionales, a través de reglas específicas. Gracias a ella se alcanza una mayor eficiencia de procesos y se reducen los costos de estos (TIBCO, s.f.).
La inclusión de esta tecnología se convierte en la pieza clave de la hiperautomatización. De esta manera, ayuda a reducir la realización de tareas de alto volumen basadas en reglas de los empleados. Esto de la mano con la integración de herramientas de Inteligencia Artificial, Machine Learning y Big Data en todo tipo de tratamientos, como la CPAP y los relacionados con biotecnología.
La inclusión de los múltiples avances tecnológicos relacionados implican
beneficios importantes para el sector salud, tales como:
Son muchas las aplicaciones de los bots en la gestión de calidad. Mediante el registro del flujo de trabajo existente, favorecen la automatización dinámica de este. Esto se logra identificando los pasos a ajustar para el usuario (Lawton, s.f.). Además, por medio de la visión artificial, ajustan y mejoran el diseño de pantalla y el funcionamiento de las plataformas. De ahí que, el manejo por parte de los usuarios es fluido y facilita los procesos de gestión en salud.
Este método tecnológico tiene la capacidad de imitar las tareas manuales de los empleados, haciéndolas con mayor rapidez y precisión. De esta manera, las conexiones entre el sistema operativo existente y el software integrado facilitan la ejecución de tareas complejas a través de instrucciones secuenciadas y detalladas (Infobae, 2021). Así se alcanza un mayor rendimiento y se disminuyen los costos.
Los protocolos de esta tecnología favorecen el procesamiento seguro de datos. Por ende, pacientes y personal pueden actualizar su información rápidamente mediante herramientas eficientes. Además, los operadores podrán realizar control y seguimiento a dicha información sin poner en riesgo la confidencialidad.
Por último, las auditorías con bots y el garantizar el cumplimiento del flujo de trabajo, en límites de tiempo y condiciones estipuladas, reduce los riesgos de incumplimiento. Por ende, se ofrece al cliente mayor calidad de servicio y seguridad en el proceso.
A modo de conclusión, vale la pena recalcar que el primer paso para la transformación digital a través de la RPA es la automatización. De esta manera, se multiplica la productividad de las instituciones médicas, favoreciendo drásticamente la atención en salud.
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