La investigación de mercados consiste en recoger información de interés para un negocio. Por ejemplo, nuevas tendencias de consumo o posibilidades de expansión de un determinado sector del mercado. Pasar por este proceso es muy importante para cualquier empresa, pues permite tomar mejores decisiones, reducir los riesgos e identificar oportunidades para generar ventas.
Esta búsqueda de información puede hacerse de distintas formas.
Aquí están los principales tipos y métodos utilizados por las empresas:
Sirve para estudiar el comportamiento del consumidor: hábitos, motivaciones, deseos y creencias. Los datos obtenidos pueden ayudarte a segmentar tu público mientras haces el prototipado de tus productos. Así podrás ofrecerles soluciones adaptadas a sus necesidades e intereses. Algunas de las formas de recolectar información cualitativa son:
Una gran ventaja de la investigación de mercados cualitativa es que ayuda a diseñar el mapa de empatía y crear publicidad que impacte en tus posibles clientes.
Es un tipo de investigación más estructurada que permite obtener cifras y estadísticas concretas. Ayuda a saber qué está pasando realmente en un segmento determinado del mercado. Por ejemplo, qué cantidad de dinero en ventas está generando un producto o dónde se compra más.
La ventaja de los estudios cuantitativos es que son confiables y se aproximan mucho a la realidad. Te dan una idea acertada sobre el funcionamiento del mercado.
Se trata de usar herramientas analíticas más sofisticadas para tomar mejores decisiones. Esta corriente se basa en ciencias como la estadística y las matemáticas para procesar información. Aplicada al mundo de los negocios, permite obtener datos valiosos. Entre ellos:
Gracias a las técnicas de investigación operativa, recolectas información muy precisa del flujo de tu negocio. Más adelante, los problemas encontrados se pueden resolver a través del design thinking.
Implica investigar todo lo que sucede en el proceso de comunicación entre tu empresa y la sociedad. Por ejemplo: analizar cómo reacciona el público a la publicidad, estudiar los canales de difusión o identificar el mensaje que una compañía pretende transmitir.
Este tipo de investigación de mercados es esencial para el branding o la gestión de tu marca. Necesitas aprender a impactar a tu audiencia y acercarte a ella. De esta forma, los consumidores te elegirán por sobre la competencia.
En este caso, el estudio se realiza extrayendo la información de la misma realidad para responder a algún problema que se haya presentado. Para llevarlo adelante, se utilizan distintas técnicas cualitativas como grupos focales, encuestas y entrevistas.
Su gran beneficio es que ofrece un acercamiento directo al mercado consumidor, a sus tendencias y puntos de vista.
Al contrario de la anterior, los datos se extraen de fuentes bibliográficas. Por ejemplo, estudios ya realizados, estadísticas e informes de la misma empresa o investigaciones de distintas instituciones.
La ventaja de este tipo de investigación es que es económica y se puede hacer leyendo en Internet.
No importa si aún no inicias tu negocio o si ya lo tienes en marcha.
Ten en cuenta estos consejos para escoger el tipo de investigación más conveniente para tu empresa:
¿Ofreces servicios, productos o ambos? ¿Tu empresa se relaciona con la economía naranja, las fintechs o un rubro más tradicional? ¿Tienes un local comercial o vendes a través de Internet? ¿Tu negocio es estacional o funciona todo el año? Debes hacerte estas preguntas antes de investigar el panorama del mercado.
¿Quieres lograr más ventas? ¿Lanzar un servicio o producto novedoso? ¿Conseguir financiación? ¿Consolidar tu marca o darle prestigio? Antes que nada, establece las metas de tu negocio. Luego podrás definir los pasos para alcanzarlas. Uno de ellos será la investigación de mercados en tu rubro.
No es lo mismo averiguar cuál es la tendencia en tu nicho, que conocer el nivel de ventas de un determinado producto o medir el impacto de una publicidad en los consumidores. Debes plantearte primero qué información necesitas recoger para usar los instrumentos adecuados.
Una gran estrategia para recoger información es relacionarte con emprendedores afines a tu negocio. En otras palabras, hacer networking. Puedes conseguir buenos contactos que compartan contigo su experiencia en el mercado.
Invertir tiempo y recursos en la investigación de mercados te ayudará a cumplir los objetivos de tu negocio. Ten en cuenta estas recomendaciones y aplica el tipo de estudio que mejor se ajuste a tus necesidades.