El estilo de vida moderno ha limitado el contacto con la naturaleza, especialmente para quienes viven en zonas urbanas con poco espacio. Sin embargo, múltiples estudios han demostrado que incorporar elementos naturales en el entorno diario, como jardines interiores o plantas ornamentales, puede tener un impacto positivo en el bienestar emocional y mental.
Los jardines interiores, también conocidos como “jardines de bolsillo”, permiten a las personas disfrutar de los beneficios de la naturaleza sin necesidad de grandes espacios. Incluso una pequeña planta sobre el escritorio puede ser suficiente para transformar el ambiente y reducir el estrés.
Investigaciones recientes han comprobado que el simple acto de cuidar una planta genera una sensación de calma, aumenta la concentración y mejora el estado de ánimo general. Según un estudio publicado en Journal of Physiological Anthropology (2015), interactuar con plantas de interior ayuda a reducir la presión arterial y disminuye los niveles de cortisol, la hormona del estrés.
Además, la vegetación interior promueve un ambiente más acogedor, mejora la calidad del aire y puede aumentar la productividad, especialmente en espacios laborales. Esto cobra especial relevancia en contextos donde el teletrabajo es cada vez más común.
No es necesario ser experto en jardinería ni tener mucho espacio. Aquí algunas ideas para comenzar:
• Jardines verticales: ideales para paredes vacías o balcones pequeños. Se pueden usar plantas colgantes como potus, helechos o suculentas.
• Mini huertas en la cocina: cultivar albahaca, cilantro o cebollín aporta frescura a las comidas y estimula los sentidos.
• Terrarios de vidrio: espacios decorativos y funcionales que requieren poco mantenimiento.
• Macetas recicladas: reutilizar envases o frascos de vidrio para darles nueva vida como hogares de plantas pequeñas.
Incorporar plantas al hogar no solo es una tendencia estética; también es una inversión en salud emocional. Los jardines interiores invitan a la contemplación, promueven hábitos de autocuidado y fortalecen el vínculo con el entorno. Más allá de la moda, se trata de construir espacios que nutran el equilibrio mental y emocional. Esta conexión verde puede marcar la diferencia en momentos de ansiedad, cansancio o desconexión.
Desde el sector solidario, se reconocen los múltiples beneficios de promover hábitos que fortalezcan el bienestar integral. A través de programas de salud preventiva, convenios con centros de bienestar y actividades formativas, Coomeva impulsa el cuidado de la salud mental y emocional, fomentando entornos más saludables para sus asociados.
Referencias
• Lee, M. S., Lee, J., Park, B. J., & Miyazaki, Y. (2015). Interaction with indoor plants may reduce psychological and physiological stress by suppressing autonomic nervous system activity in young adults: a randomized crossover study. Journal of Physiological Anthropology, 34(1), 21.
• Bringslimark, T., Hartig, T., & Patil, G. G. (2009). The psychological benefits of indoor plants: A critical review of the experimental literature. Journal of Environmental Psychology, 29(4), 422-433.