La llegada de la época decembrina conlleva la aparición de calles
repletas de luces y adornos y de muchos colores. Los colores de
Navidad tradicionales son el rojo, el verde y el dorado.
El rojo, está asociado con el amor, pasión y fuego, pero no en el sentido terrenal. El rojo refleja la sangre que Jesús sacrificó en la Cruz y el calor que abriga a las personas. Los primeros cristianos adaptaron tradiciones paganas dándoles un significado religioso, por lo cual convirtieron el color rojo en un símbolo de la sangre de Jesucristo.
El verde, se asocia con la naturaleza y la esperanza. El verde refleja felicidad, bienestar y progreso. Este color se usa para simbolizar la vida que fluye y la esperanza que el nacimiento de Jesucristo trae a un mundo frío.
El color verde en el siglo IV era
especial para los paganos, puesto que creían que las plantas y
árboles que conservaban su color verde en invierno, eran sagradas
y tenían poderes especiales, por lo cual consideraban de buena
suerte tener plantas de color verde en la época decembrina, como
es sucede con el muérdago, planta de amplia utilización usada en
coronas de navidad para proteger del mal y como un augurio de
prosperidad.
De allí surge otra tradición muy arraigada en la cultura estadounidense, según la cual si un hombre y una mujer se encuentran en una puerta en cuyo marco hay ramas de muérdago deben besarse.
El dorado, se asocia con la prosperidad y abundancia tanto a nivel material como espiritual. Muchas personas utilizan este color en la decoración para atraer la fortuna a su hogar. El color dorado es sinónimo de luz solar y radiación y su uso en luces, adornos, velas y la estrella del árbol de navidad, simboliza la esperanza, ya que representa la estrella que dirigió a los Reyes Magos hasta el lugar de nacimiento del niño Jesús.
El blanco se asocia con la nieve característica de la estación invernal, el cual refleja pureza y esperanza alrededor de la llegada de un nuevo ciclo y de un mejor futuro. Por esto en países con las 4 estaciones, es típico de la Navidad el realizar muñecos con la nieve que cae en la zona y decorarlos.
El plateado, simboliza la magia navideña y la espiritualidad implícita en las celebraciones decembrinas.
El color plateado era usado en la antigua Roma para dar valor a las cosas, este color representa vitalidad y felicidad. Animémonos a decorar nuestra casa con todos los colores navideños, pero lo más importante más allá de los regalos y decoración, revistamos nuestro corazón de buenas intenciones, armonía y perdón, y compartamos con alegría las fiestas decembrinas con familiares y amigos y que el espíritu navideño permanezca en nosotros siempre, sin importar en que época del año estemos.