A nivel personal, la estabilidad económica es la capacidad de disfrutar la vida y concretar tus proyectos sin grandes preocupaciones financieras. Alcanzarla es fundamental para garantizar tu tranquilidad y la de tu familia. Te permite ir construyendo tu patrimonio y ampliar tus opciones para el futuro.
Cuando eres económicamente estable, adquieres capacidad de solvencia. Esto significa que puedes afrontar gastos corrientes e inesperados, como también gestionar tus deudas o adquirir un préstamo para alcanzar una meta y pagarla a tiempo.
No importa cuáles sean tus objetivos: comprar una casa, cambiar el carro, darles a tus hijos una buena educación o mejorar tu calidad de vida en general. La estabilidad económica es clave para lograrlo. Sigue estas recomendaciones que te ayudarán.
Tener una situación financiera equilibrada no depende tanto del dinero que ganas.
Más bien, se trata de gestionarlo de forma eficiente y lograr que tu estilo de vida esté alineado con tus ingresos.
¿No sabes en qué se te va el dinero, o no sabes cómo repartirlo para que te alcance? Distribúyelo en un presupuesto. Estructurar tus gastos es clave para aprovechar tus ingresos al máximo. Estos son métodos para hacer un presupuesto:
Tal vez ahora mismo estés llevando un estilo de vida que no te puedes permitir. ¿Cómo saberlo? Estas son algunas señales:
Si quieres alcanzar la verdadera estabilidad económica, necesitas evitar vivir por encima de tus posibilidades. Por un tiempo, lleva el estilo de vida que puedes, no el que quieres.
Los gastos hormiga y los lujos pueden llevarse tu dinero. No está mal darse un gusto de vez en cuando, pero debes establecer prioridades. Piensa primero en aquellos gastos que sí o sí debes hacer para tus necesidades básicas. Por ejemplo, arriendo, servicios, comida, transporte y educación
Asegúrate de tener lo suficiente para cubrirlas; luego podrás pensar en usar el resto de tus ingresos. Una buena idea es invertir dinero. Esto te dará una rentabilidad que hará crecer tu patrimonio.
El fondo de emergencias es una gran estrategia para mantener unas finanzas saludables. Uno nunca sabe lo que puede suceder a futuro. Lo importante es que, si tienes un imprevisto, no te endeudes para cubrirlo.
¿Un truco para ayudarte a crearlo? Abre una cuenta de ahorro programado y destina, todos los meses, una cantidad fija para constituir tu fondo de emergencias. Así te comprometerás con el ahorro y, además, obtendrás una rentabilidad.
¿Pagas un crédito o hipoteca todos los meses? ¿Tienes claras las fechas y tasas de interés? ¿Conoces los costos de refinanciación de tus tarjetas de crédito? Es muy importante que sepas toda esta información. Te permitirá manejar mejor tus pagos y estar al día con las deudas.
Por otro lado, esta es una manera de saber si puedes tomar nuevas obligaciones financieras. La estabilidad económica no equivale a no tener deudas, pero sí a poder afrontarlas en tiempo y forma.
Hay un dicho que dice: no pongas todos los huevos en una canasta. Esto significa que no tienes que arriesgar el 100% de tu capital en una sola inversión. Es mucho más seguro y rentable diversificar.
Por ejemplo, mantén un porcentaje en dólares, otro úsalo para un CDT o compra acciones en alguna empresa de confianza. Si te animas, también puede comprar criptomonedas.
Tener un plan te permitirá ser eficiente y conseguir resultados. ¿Quieres mejorar tu situación financiera? Aquí tienes algunos pasos sencillos a seguir:
La ansiada estabilidad económica no se logra de la noche a la mañana. Pero sí puedes empezar desde hoy. Aplica estos consejos en tu día a día y lleva unas buenas finanzas personales.